No existo.

Y ahi estabas, viendo a todas menos a mí. Y ahi estaba yo, viendo a nadie excepto a vos. Me saludaste como a otra más, sé que no existo para vos. Intenté ignorarte y refugiarme en mis amigos y en el licor de melón con sprite. A cada rato pasabas, y mis ojos no podian evitar seguirte. Tus ojos también observaban, pero no a mi. Una opresión en el pecho, otra vez, la misma de días atrás, no podía respirar, decidí no rendirme esta vez, y seguir respirando. Seguias ahi, revoloteando de lado a lado. Seguia ahi, revoloteando de lado a lado, ignorándote. Entonces lo vi, traté de no ver, intenté correr la mirada, pero era imposible. Esta vez, la opresión era enorme, era un especie de agujero que me quitaba el aire, necesitaba cubrirme con algo, salir corriendo de ahi, ocultarme en mi. Ya no lo aguantaba, el aire era cada vez más escaso.

Y de nuevo tú.

Alzé mi mirada, y encontré tus ojos, que me observaban y que rápidamente al notar el contacto con los míos bajaste. Me quedé analizandote, ¿Será esa mirada misteriosa la que me atrae de ti? ¿Ó la humildad que no te deja ver la belleza que irradias? ¿Será tu reservada personalidad? Al notar que te acercabas hacia donde yo estaba, baje de mi nube enamoradiza y me oculté tras mi cabello. Te acercaste aún más a mi, me miraste con tus ojos oscuros, me dedicaste una media sonrisa y esbozaste un "hola". Mi mundo tembló.

Harta de pasar de buena a buenuda.

Depositas tu confianza en una persona, le tomas cariño, asi como le tomas cariño le ofreces todo lo que podes, das y das, das y das. Crees que esa persona es especial, te sentis feliz con ella, te entiende, y vos la entendes a ella. Siempre una anda con buena predisposición, siempre viendole lo bueno a esa persona, a pesar de que tenga sus fallas "nadie es perfecto" pensás, lo cual es verdad. Y te empezás a dar cuenta que esas fallas, ya se van volviendo algo diario, algo que lastima, algo por lo cual no escuchas un "lo siento", algo que te marca, algo que te hace analizar si en verdad ese es un amigo o si sos la forra del mundo.
¿Qué haces con todo el cariño que le tenias? ¿Qué haces con los momentos vividos? ¿De verdad importaban para la otra persona?